El 27 de enero de 2025, los mercados financieros y la industria de la inteligencia artificial se han visto sacudidos. La start-up china DeepSeek ha desarrollado un nuevo modelo de código abierto y bajo coste que deja perplejos a algunos analistas, pero que podría amenazar los cientos de millones invertidos en la infraestructura de la IA.
Una nueva amenaza para los agentes de la IA
La start-up DeepSeek acaba de presentar su modelo DeepSeek-V3, un asistente inteligente capaz de competir con las mejores soluciones del mercado, como ChatGPT de OpenAI. Lo que distingue a este modelo, además de sus prestaciones, es su coste de desarrollo notablemente bajo, estimado entre 5 y 6 millones de dólares, bastante menos de lo que invierten empresas americanas como OpenAI o Meta. El impacto en los mercados financieros ha sido inmediato, afectando no sólo a los gigantes de los semiconductores como Nvidia (-17% y cerca de 600 millones de dólares de pérdida de capitalización bursátil) y Broadcom (-17%), sino también a los proveedores de servicios como Oracle (-14%), y a los proveedores de infraestructuras de centros de datos como Cisco (-5%).
Un modelo de código abierto que permite redistribuir las cartas
Uno de los aspectos más delicados de DeepSeek-V3 es su apertura. A diferencia de la mayoría de sus competidores, DeepSeek ha optado por hacer que su modelo sea de acceso libre y modificable bajo una de las licencias de código abierto más conocidas. Esta decisión podría transformar radicalmente el ecosistema de la IA al permitir a un gran número de actores, más allá de las fronteras chinas, beneficiarse de este enfoque de la inteligencia artificial. Los precedentes históricos (normas compatibles IBM PC en 1980, navegador web Mozilla Firefox en 2000, sistema operativo Android en 2010) demuestran que las arquitecturas existentes han favorecido a menudo la innovación, al tiempo que han eliminado las barreras de entrada para los nuevos competidores.
Modificación de los modelos de rendimiento
El anuncio de DeepSeek pone en entredicho la hipótesis dominante según la cual el rendimiento de los modelos de IA mejora con el aumento de los parámetros, de los datos utilizados para el ajuste de los modelos y de la capacidad de cálculo puesta en marcha.
Si DeepSeek pretende probar y satisfacer las aplicaciones de inteligencia artificial genérica con un coste menor, las considerables capacidades de cálculo que se están construyendo en la actualidad podrían llegar a ser excesivas, lo que provocaría una bajada de los precios y una reevaluación de las estrategias de inversión en IA. Para la industria de semiconductores, servicios en la nube y centros de datos, el problema es el tamaño. Una reducción de la demanda de equipos de punta podría provocar una crisis de sobrecapacidad, lo que conllevaría una reevaluación de toda la cadena de valor de la IA.
Mercado financiero: mayor volatilidad a corto plazo
A corto plazo, los mercados deberían prepararse para un periodo de volatilidad, ya que los inversores están reevaluando el valor de las empresas implicadas en la IA. Los grandes de la tecnología, como Nvidia, Broadcom y ASML, a la cabeza de las tecnologías más avanzadas, podrían experimentar un descenso de su valor. Pero los riesgos no se limitan a las empresas cotizadas.
Los fondos de capital riesgo y los inversores institucionales que han masivamente en IA estos últimos años también están bajo presión. Sin embargo, hay que corregir los efectos a tiempo. Si a corto plazo esta corrección es inevitable, a medio plazo podría crear un entorno más favorable a la innovación, estimulando modelos de IA menos costosos y más fiables.
Geopolítica: una amenaza para la influencia estadounidense
La puesta en marcha de DeepSeek se da en plena rivalidad tecnológica entre Estados Unidos y China. Su fundador, Liang Wenfeng, opera desde Hangzhou, un lugar fuerte de la IA en China, y recientemente se reunió con el Primer Ministro chino Li Qiang. El enfoque de DeepSeek y la atención que ha suscitado pueden considerarse una respuesta estratégica a las crecientes restricciones de acceso de China a las tecnologías avanzadas de Estados Unidos.
Los modelos de IA menos potentes reducirían considerablemente el impacto de las restricciones estadounidenses en el ecosistema chino de IA, históricamente dependiente en gran medida de las tecnologías estadounidenses (DeepSeek también se desarrolló utilizando una gama de pcs Nvdia que, aunque avanzados, no los más potentes).
También podrían ser beneficiosos para las regiones del mundo que tienen un gran interés en las aplicaciones de IA, pero una infraestructura limitada, como Europa.
Tras estos primeros anuncios, hay que preguntarse por los posibles límites de DeepSeek. Numerosos expertos señalan que sus costes de desarrollo son probablemente subestimados y no incluyen, entre otros, los costes relacionados con el almacenamiento de datos, los equipos de red, el consumo de energía, los salarios de los ingenieros de IA y los recursos de código abierto. Por lo tanto, el coste total de construcción del modelo será probablemente superior al declarado.
> Más información sobre la guerra tecnológica entre China y Estados Unidos en nuestro estudio económico.